"Quien se enfada por las críticas, reconoce que las tenía merecidas"

1 de julio de 2008

El verano ya llegó

Y sí, es muy posible que el título llegue con retraso, pero... Ya sabeis, notas perfectas, cosas interesantes... No hay tiempo que dedicar al blog. Por eso en las últimas entradas todo parecía muy... mediocre. Era el típico copiar/pegar del fotolog al blog... Algo no propio de mí, claro. Pero, ¿qué cojones hago intentando justificarme? Si este blog sólo lo visito yo misma, y por pena, ¿para qué tantas formalidades?
Vamos a lo que importa... Ah, no, procedo a contaros mi vida desde hace unas dos semanas.
Pues bien, recibí mis amadas vacaciones un caluroso jueves 12 de Junio, era, por fin, libre. Pero... ¡no! ¡Pardiez! ¡Qué calamidad! ¡La profesora de Inglés... quería que me presentara a subir nota!
Así que fui rápidamente a hablar con ella.
- María del Mar...
- Dime, hija...
- Euh... He estado mirando la lista con las notas finales...
- Ah, sí...
- Y he visto que me ha puesto para subir nota
- Claro, creo que tienes muchas posibilidades. Eres una chica inteligente, y si estudias un poco, creo que obtendrás el sobresaliente con facilidad. De todas formas, el examen no será demasiado difícil, y a ti el inglés se te da bien, esto no será más que lo que hemos dado en clase...
- María del Mar...
- ¿Qué?
- Que no me voy a presentar
Y así, tan feliz, media vuelta, silbido alegre... y a por mis preciadas vacaciones.
Así comenzó todo.
Después, llegó la primera semana de vacaciones... Nada del otro mundo. Acostumbrada al horario escolar, me levantaba todos los días antes de las 8 y, como, gracias a Dios, no había nada que hacer, me ponía a dar vueltas por la casa.
Esto me ayudó a descubrir que... Mmm... Vale, no me ayudó a descubrir absolutamente nada, como todo lo que hago.
Pronto me di cuenta de que no puedo pasar todo el verano así, dando vueltas o con mi trasero pegado a la silla (o a cualquier sitio, es la ventaja de tener un portátil), por lo que decidí apuntarme a algo.
Y sí, me apunté a natación. Muchos lo consideran una gilipollez, teniendo en cuenta que poseo piscina propia, pero no poseo un entrenador personal que me diga lo que tengo que hacer... Claro que a mí no me gusta que me digan lo que tengo que hacer y siempre acabo haciendo lo que me da la gana.
También, decidí buscarme trabajo. Pero eso es algo que aún queda algo borroso, pues hay que esperar a que mi padre decida colocarme donde sea.
En cuanto a la natación... Me ha tocado con gente mayor... muy mayor... Imaginaros que vais paseando por la playa y encontrais de repente a una británica de ochenta años (tipo canción de los Mojinos) con las tetas fueras y el típico "moreno" inglés (roja como una gamba). Pues mucho peor que eso, es estar donde yo estoy dando natación.
Al menos me consolaría si me tocara con el monitor que está bueno, pero, como tengo tanta buena suerte, me ha tocado con una tía. Y, no, por mucho que tantos de vosotros (no sé por qué hago como que me lee medio país si sólo me leen cuatro gatos y ni eso) penseis que soy lesbiana, no lo soy. No tengo la culpa de que mi pareja parezca una tía... Manué, haz el favor de no leer esto.
Me estoy sorprendiendo a mí misma, no estoy dejando espacio entre los párrafos y esto va a quedar muy apretadito... Hmmm... Bueno, ¿y a mí qué más me da? Si la gente pasa del blog de lo lindo...

Venga, dejaré espacio entre este párrafo y el anterior porque ahora viene algo muy importante: Mi experiencia en el Otaku Convention de Tomares, Sevilla, el Sábado 28 de Junio.
Pues bien, me levanté a eso de las 7 y media de la mañana, para variar, ducha, desayuno y mochila al hombro. Salí de mi casa y me fui a la parada del autobús Trigueros-Huelva. Entonces, lo pensé: Hoy el día va de autobuses.
Una vez en Huelva, tocó esperar a Manué que, por primera vez en su vida (nótese la ironía), llegó tarde. Luego, me di cuenta de algo muy importante:
Había olvidado mi autorización y soy menor.
Así que a casa de Manué a por lápiz y papel para hacerme una autorización a lo cutre.
Y después, a coger un autobus de línea para llegar a donde teníamos que coger el autobus a Tomares. Llegamos tarde al punto de reunión, pero más tarde aún llegó el autobus.
Llegamos a Tomares a las 12 y media cosa así, y directamente me fui a los stand del Otacón, en busca de... chanchanchan... Mi "hermanito" Cristian, un personaje al que conozco desde hace tres años vía msn, y nunca tuve el ¿placer? de conocer en persona. Hasta ese sábado. Por fin tengo mi camiseta de Sonata, por cierto.
Compré muchas cosicas, lo pasé bien, y me reí mucho... Pero, ¿a quién le importa?
Lo importante es... ¡La cucaracha del restaurante Chino!

Sólo... contemplad.




Sí, soy la de los pantalones de camuflaje ártico que pasa de mirar a cámara.

La próxima entrada más, pero no mejor, porque eso es imposible.



Atte:

Niña Miedo, que vuelve a no llevar firma.


PD: España ha ganado la Eurocopa... ¿a que no os habíais enterado?